El auge del narcotráfico en la Mosquitia
El narcotráfico en Honduras ha afectado profundamente a la Mosquitia, escalando desde la década de 1970. Para finales del siglo XX ya se detectaban personas transportando drogas por la región, pero la actividad se intensificó alrededor de 2008.
Según la DEA, en 2011 más de 100 avionetas provenientes de Colombia y Venezuela llegaron a la Mosquitia, y a partir de 2012 se comenzaron a usar rutas marítimas.
“Llegaban avionetas, lanchas y barcos. Los jóvenes encontraban fardos de droga en el río y los traían al pueblo. Rápidamente, colombianos y mexicanos los compraban por quinientos, mil o hasta dos mil dólares”, recuerda Edgardo.
Redes de narcotráfico locales y extranjeras
Se formaron complejas redes de narcotráfico que aprovecharon la densa selva, los ríos navegables y la escasa presencia estatal para mover grandes cantidades de cocaína y otras drogas ilícitas. La extradición de narcotraficantes a Estados Unidos a partir de 2014 debilitó parcialmente estas operaciones, y la desarticulación de cárteles como Los Cachiros, Valle Valle y Winter Blanco reveló la estructura local.
Entre los casos más relevantes, los hermanos Roberto y Seth Paisano Wood, líderes políticos de la región, fueron detenidos por narcotráfico en 2019, aunque lograron sobreseimiento en 2021. Más recientemente, Wilmer Manolo Wood, actual alcalde de Brus Laguna, fue arrestado en agosto pasado por liderar operaciones de narcotráfico durante al menos 15 años.

Honduras: del narcoestado a la lucha contra las drogas
Durante la presidencia de Juan Orlando Hernández, Honduras fue catalogada como un narcoestado por autoridades estadounidenses. Hernández habría recibido sobornos de narcotraficantes, lo que debilitó la acción policial y militar contra el tráfico de drogas, y permitió el libre paso de cargamentos ilícitos.
Desde 2022, con la administración de Xiomara Castro, se ha reforzado la presencia militar y se han iniciado operativos contra el narcotráfico. La destrucción de cultivos ilícitos ha mostrado resultados: solo en una operación reciente se eliminaron cerca de 900 mil plantas de coca y amapola en la frontera entre Olancho y Gracias a Dios, superando los resultados de años anteriores.
Impacto social del narcotráfico en la Mosquitia
Aunque el narcotráfico generó una aparente prosperidad en algunas comunidades, también alteró la vida cotidiana:
- Muchos se acostumbraron al dinero fácil y disminuyó la disposición al trabajo.
- Aumentaron los homicidios y la violencia.
- Se incrementó el consumo de drogas.
Carretera ilegal amenaza la Reserva de la Biósfera del Río Plátano
Una carretera ilegal de 150 km conecta Dulce Nombre de Culmí (Olancho) con Wampusirpi (Gracias a Dios). Se desconoce su constructor, pero se sospecha de narcotraficantes.
La vía ha provocado deforestación y contaminación, destruyendo unas 2.000 hectáreas de bosque y afectando la biodiversidad local. Además, se presume que facilita el tráfico de drogas, armas y ganado.
Aunque la presidenta Xiomara Castro creó los batallones verdes y anunció detener la construcción, autoridades como Manuel Zelaya Rosales y el ministro Lucky Medina decidieron mantener la carretera, generando descontento entre los pobladores por la poca presencia de fuerzas de seguridad en la zona.
